viernes, 18 de marzo de 2022

¿Hasta cuándo?…

¿Hasta cuándo?…

Por Fabián Núñez Baquero

18/03/22

 

¡No más guerras por Dios! ¡No más negocios!
Porque sólo es negocio la masacre y la guerra :
¡Y la guerra mundial negocio de negocios!
¡Y matar a la gente un negocio que aterra!

¿Hasta cuándo este caos de violencia y ganancia,
¿¡De crédito y de muerte,de préstamos letales!?
No sólo se mata con drones y arrogancia
¡Se mata con las deudas y aumentos porcentuales!

¿¡Hasta cuándo el azote del lucro, el beneficio
Si tenemos riqueza para donar a todos
Que se va en la basura como mal desperdicio!?

¿Hasta cuándo la barbarie de esclavizar el mundo?
¿¡La vanidad inmunda de tener hasta los codos!?
Tener y más tener… ¡mundo avaro,mundo inmundo!





 

martes, 8 de marzo de 2022

Toda guerra es genocidio

Toda guerra es genocidio

 Fabián Núñez Baquero

08/03/22



¿Qué queda del amor entre hermanos y hermanas


Si la guerra acribilla con armas inhumanas?


Se mata con cohetes,con bombas,con misiles,


Con aviones,con metrallas que asesinan a miles,


Con cobarde distancia de máquinas cobardes


Que solo dejan huella de distantes alardes...


Que ni siquiera prueban la natural destreza


De los seres humanos,su habilidad y fuerza


Sólo es masacre impune,vil crimen,matanza,


Todo es carnicería cada guerra que avanza,


No hay gloria ni prodigio ni valor ni heroísmo


¡Es atroz genocidio todo militarismo!








jueves, 3 de marzo de 2022

Anatema a Putin

Anatema a Putin

Fabián Núñez Baquero

03/03/22

 

¿Qué haces Caín Putin matando a tus hermanos?
Arrogante asesino de criminales manos
No te basta el veneno,el puñal por la espalda,
Oligarca soberbio,tu mafia te respalda,
Todo el pueblo de Rusia y Ucrania te condena:
Obreros,campesinos piden máxima pena,
Que te cuelguen del Kremlin en la horca más alta
Destinada al ruin ladrón que al más pobre asalta,

Te quiten la riqueza amasada con el robo,
Mala bestia con garra de buitre negro y lobo,
Juegas con la masacre mal nacido del diablo,
Te gozas con estrategias de burdel y de establo,
Usas a los soldados a tu vitando antojo,
Maltratas funcionarios a quien pones el ojo.
La guerra contra Ucrania también es en casa,
Prepotente maldito racista con su raza,
Evidente fascista que habla contra el fascismo,
Terrorista que no oculta su amor al terrorismo,
Fanático cristiano pero sin cristianismo,
Reencarnación de Stalin y su mal comunismo :
¡Eres bestia de oriente y del capitalismo!





 

domingo, 2 de mayo de 2021

Los Hermes, poetas del misterio y de la gloria

 Medardo Ángel Silva 

Cabeza del Modernismo en Ecuador


Los Hermes, poetas del misterio y de la gloria

Por Fabián Núñez Baquero

12/04/21

... Al cielo,trono azul de la suprema calma,

levanta el poeta sus dos brazos piadosos

y los resplandecientes fulgores de su alma

le borran la visión de los pueblos furiosos….


Sed bendito, Señor, que dais el sufrimiento

como el santo remedio de nuestras impurezas,

esencia misteriosa y divino fermento

que anticipa a los santos las eternas bellezas.


Yo sé que al poeta guardáis un lugar

en las filas armónicas de vuestras santas legiones

y que a la divina fiesta le invitáis a cantar

con Tronos, Virtudes y Dominaciones…


...Yo sé que es el dolor la única nobleza

que el infierno y los hombres jamás corromperán,

yo sé que mi corona de mística riqueza

todos los tiempos, todos los mundos forjarán...


Charles Baudelaire Flores del mal- Bendición – fragmento

Traducción de Sergio Núñez Santamaría


¿Pero que significan estos versos magníficos ? Pertenecen a Charles Baudelaire,el llamado Dante de la decadencia. Podría el imperio francés estar en su ocaso,no obstante,como el sol poniente entrega su postrero y rico esplendor,su poesía en ese momento estelar,su literatura, será la mayor conmoción en el planeta.

Cuesta creer que este poema fuera escrito por el mismo poeta maldito y diabólico llamado Charles Baudelaire, quien fuera enjuiciado y sentenciado por atentar contra las buenas costumbres y contra la moral pública por publicar su extrañamente rebelde y bello libro titulado Las flores del mal. Un profundo místico se escondía tras su musculatura vociferante, y el burdo,grosero jurado no pudo ver su fuerza estética edificante. El hecho de que fuera traducido por un Hermes como Sergio Núñez Santamaría tiene un valor añadido para nuestra literatura.

Hace doscientos años- un 9 de abril de 1821- nació el poeta francés Charles Baudelaire, el virtual fundador del simbolismo y el modernismo. Este poeta que fue cerebro y parte de los llamados Poetas Malditos en la saga literaria francesa, marca la era de la poesía y literatura modernas en el mundo. De alguna manera se puede decir que todavía vivimos de su luminoso legado artístico. Baudelaire es un faro portentoso en el escenario vasto de las eras imaginarias.


Y, a la vez, y como proyección de este trascendental suceso, aproximadamente estamos a un centenario del surgimiento y operación en la década del 20 del siglo pasado del grupo literario Hermes de Guayaquil, Ecuador. Los dos son acontecimientos memorables para la literatura, en especial, la poesía. Y los dos eventos están claramente vinculados aunque sus protagonistas se hayan encontrado con un océano de por medio y a pesar de no saber unos de otros y de no hablar el mismo idioma. Solo el arte y el pensamiento unen de verdad a los pueblos. Y esto a pesar de que en los últimos tiempos las personas tiendan a hacer caso omiso de fechas como estas que establecen hitos históricos y delinean la continuidad de la cultura.


En el Ecuador,que había pasado por su gloriosa revolución burguesa de 1895,cuyo epílogo trágico será el asesinato de Alfaro y sus generales en 1912,se iniciaba,como un apaciguamiento estético,la aparición del modernismo.

Mientras ahora las noticias y la publicidad viajan a mayor velocidad que la luz, difundiendo sucesos y hechos que hasta pueden carecer de importancia, en el siglo pasado la cultura se tomaba su tiempo, sedimentaba lentamente eventos y personajes que acaso necesitaban un nivel de propaganda adecuada. Talvez por eso los Hermes no fueron nombrados en los anales literarios del Ecuador, pero existieron y lo sabemos gracias a uno de sus integrantes, quien, como buen escriba, lo consigna en su libro de memorias.


El autor de Flores del mal , así como los poetas malditos, en especial Verlaine y Rimbaud, son acaso los poetas que procrearon – sobre todo a través de la increíble obra de Rubén Darío- a los modernistas en el Ecuador, en especial al clan de los poetas que llamaron a posteriori Decapitados y a los Hermes. De los Decapitados se conoce mucho porque constan en los anales literarios, aunque su nombre fue una nominación posterior creada por el periodista y crítico literario Raúl Andrade. No así de los Hermes, agrupación cuya referencia solo la encontramos en el libro de memorias inédito de Sergio Núñez Santamaría intitulado Los ríos del tiempo.


Mientras de los Decapitados no podemos afirmar que fueron o funcionaron como grupo, de los Hermes no podemos decir lo mismo, puesto que hasta su nombre es una invención y decisión de ellos. Al menos así nos lo hace saber este libro que de por sí engloba no solo la rareza de la escritura, personajes y hechos, sino que su trayectoria es un milagro de supervivencia. 1


De él he tomado la legendaria silueta de los Hermes y su decurso casi evanescente. A más de esto he tenido en cuenta la memoria y la referencia oral, así que, con estos elementos, trataré de reconstruir más o menos los hechos.


Nunca pensó Enrique Segovia, el poeta verleniano, que iba ser en la práctica un memorando amical de los

Hermes cuando llegó a la casuca de Sergio Núñez Santamaría, sita en el barrio de la Magdalena en Quito. Era un jayán de dos metros de altura y con un soberbio rostro de emperador huancavilca un poco venido a menos, es verdad, por la normal erosión de la vida paradisíaca del puerto y los castillos heroicos artificiales. De alguna manera la visita era una retribución de otra que antes Núñez había realizado al poeta Segovia en el Puerto.

Solo que ahora el pretexto era heráldico, Segovia venía con el decoro del artista, que siempre lleva un símbolo de su quehacer a mano para exhibir su capacidad de bardo o soñador activo. Esta vez Segovia traía un poema épico: era el mismo que su compañero, el ilustre Fálquez Ampuero, había considerado en el grupo, en público, un gran poema, tan lacónico como definitivo era él y su criterio: gran poema. Núñez, ya se encargaría de publicarlo en el libro antológico que por entonces todavía no preparaba: Los 100 mejores poemas ecuatorianos, antología que apareció una década después de esta visita.


Estábamos a mediados de la década del 50 del siglo pasado. Segovia y Núñez se veían a los años. Pasaron de los preliminares más o menos obvios y familiares a los recuerdos del arte, de la poesía, sus héroes y sus víctimas. Los dos conocían exactamente el significado material de héroes y víctimas, en poesía al menos. A los dos les hermanaba Baudelaire, Mallarmé y Verlaine, la vida y la poesía. Bien sabían que eran acaso los más modestos del grupo, pero eran Hermes, eso nadie les podía quitar. Y hablaron como Hermes que eran y recordaron los primeros días, con la misma parsimonia o acaso secreto heredados del dios y poeta griego.


Parece que Aurora Estrada, fue la entusiasta gestora y coordinadora, y eran acaso los días finales de 1920. Había pasado poco tiempo de la trágica muerte de Medardo Ángel Silva ( MAS ),con su séquito de dolor, asombro y de misterio. Talvez por eso, porque deseaban que el gran bardo guayaquileño sobreviva a la muerte, se apropiaron con gozo y misterio del nombre de Hermes porque este dios, igual que Orfeo, tenía libre ingreso en el Hades- el infierno griego- y porque había inventado la lira y la zampoña, instrumentos muy caros a los aedas. 

Hermes era la deidad numinosa de lo secreto, de lo oculto, de la inmortalidad y de la invención poética. Decir que era mensajero de los dioses era una manera de reconocer su don de vaticinio y creación. Así como asignarle la invención de lira y zampoña era reconocerlo como poeta. Pero también Hermes era el dios que había juntado, en extraña fusión y bajo su advocación mística, las culturas griega y egipcia, y no olvidemos que el maestro mágico, autor de los Poemas saturnianos, así como el mismo maestro traductor de Poe al francés, tenían pasión por lo vedado y mistérico.

 Había por tanto un clima esotérico que la agrupación aceptaba y además, y sobre todo, por su adherencia a los gustos culturales de sus maestros a quienes respetaba y traducía. Aunque los Hermes oficialmente surgieron después de la muerte de MAS, algunos de sus integrantes aparecían ya compartiendo tribunas literarias y medios periodísticos con los Decapitados.


Quizás sea necesario destacar la obra de un raro integrante del grupo, me refiero al parnasiano Francisco J.Fálquez Ampuero: era un poeta mayor que ya por ese tiempo había publicado Mármoles lavados, Rondeles indígenas y que después será reconocido por su gran poemario Gobelinos . En este libro en particular destaca su prólogo dedicado al estudio de las eras imaginarias de la humanidad, el avance de la ciencia y el progreso, así como consolida su conocimiento del parnasiano José María de Heredia. Fálquez, quien fuera embajador del país en Bélgica, fue, además, un gran traductor de literatura francesa y del poeta cubano francés Heredia. Y él mismo un ilustre poeta parnasiano. Hizo un trabajo tan considerable de asimilación y traducción de la literatura gala que ni siquiera el gran traductor poeta Jorge Carrera Andrade, años después, pudo superarle.

Era el tiempo cuando el francés reinaba como el idioma cultural por excelencia,y de la misma diplomacia universal. La poesía y la literatura francesas se encontraban en el pináculo de su gloria. Por cierto Decapitados y Hermes leían a Baudelaire, a parnasianos y simbolistas,en el original. El mismo MAS en sus artículos literarios citaba muy a menudo en francés. Si bien el imperio estaba en decadencia,la cultura francesa dominaba el mundo y París constituía el faro universal codiciado por escritores y artistas. Por eso las traducciones afirmaban esa realidad y enriquecían las culturas locales tanto de Europa como de América.

Son ejemplares las traducciones de Fálquez Ampuero, las de Miguel Ángel Granado y Guarnizo y de jacinto Joaquín Pino de Icaza. Incluso Sergio Núñez – décadas después-publicó luego en 1956, en su libro La Poesía que vuelve, traducciones suyas de Baudelaire, como El Albatros, Bendición,Correspondencias, Caín y Abel. Los que podían,como Miguel Augusto Egas Miranda (Hugo Mayo) y Fálquez Ampuero,viajaban a la patria de Verlaine o Rondembach. París y Francia eran- gracias al portentoso desarrollo de la imaginación de la poesía simbolista, la Meca de la literatura universal.

Decapitados y Hermes disponían de medios publicitarios como las revistas Síngulus y Proteo y a la vez de los Jueves Literarios del Diario El Telégrafo, sobre todo Medardo Angel Silva, quien era el joven genio que dominaba el mundo literario de la época. Pero los Hermes disponían de notables ensayistas como Pino de Icaza, de quien decía Núñez que había escrito el mejor ensayo sobre MAS que él conocía; Granado y Guarnizo fue un agudo ensayista y también traductor, y Aurora Estrada era la poetisa reconocida y amada; y luego, además, los que luego se integraron.
La pléyade de artistas
citada por Núñez es numerosa y de altura,sin que falte el elemento encantador de las mujeres,del que carecieron Los Decapitados. Su inclusión para la época es un factor de progreso y orgullo,al menos así lo deja notar su cronista,autor de Aurora Boreal,al que dedica un soneto Aurora Estrada,como homenaje artístico. Solo el poema de Aurora Estrada es de por sí un precioso hallazgo y recuerdo.
Pero dejemos que el propio autor de Los ríos del tiempo describa a los primeros integrantes del grupo y el poema de Aurora Estrada.


...Enrique Segovia, poeta verleniano, el no menos notable prosista Alfonso Rubén Irigoyen. Así se poetizaba por esos días .Nos hallábamos en locura modernista. Y por otra que fueron muchos los que de buena pasada engrosaron el curioso grupo: Francisco J. Fálquez Ampuero, Remigio Romero Y Cordero, Ricardo Darquea, Leopoldo Benítez Vinueza, Joaquín Pino de Icaza, el Benjamín del grupo, Miguel Ángel Granado y Guarnizo, Miguel A. Barona y el que renueva estos recuerdos. No podían faltar las mujeres: la propia Aurora Estrada, Zaida Letti Castillo y dos o tres en algún confín lejano con quienes cambiábamos dedicatorias y poemas . No me incita la vanidad, sino el mejor brote poético de la Estrada momentáneamente entusiasmada con el libro exornado con la carta de Salvador Rueda, el brote fue el soneto que lo transcribo:

EN ESTA NOCHE SANTA

Al ilustre poeta de “AURORA BOREAL" Sergio Núñez, íntimamente.

i Qué dulce paz divina bajo la buena luna,

bajo su casta lumbre cuánta serenidad!

Nadie podrá esta noche acariciar ninguna

oscura idea indigna de su azul santidad.



La ciudad me parece una ciudad ya muerta;

de su reposo brota tan extraña quietud;

es que tal vez en lo alto hacia el mundo está abierta

una mano sagrada con piadosa actitud.



Flota un vago perfume de rosal florecido,

un piano sollozante llena el aire dormido

de un dolor infinito que no puedo expresar.


Yo siento suavemente que mi perenne angustia

en esta noche santa como una flor se mustia,

y muy bajo me digo : Ah si pudiera amar !

AURORA ESTRADA.

 En Guayaquil 13 de Enero de 1921.

Aparte esta primicia literaria, es evidente que hay nombres que luego pasarán a la historia como notables poetas y escritores, a más de la misma Aurora Estrada, la imán que aglutinaba al grupo. Nos referimos a Remigio Romero y Cordero, quien luego será autor de libros de excelencia épica como Romería de las Carabelas, La Quiteida y de poemas líricos inolvidables como Elegía de las Rosas, Él era un hombre raro… Leopoldo Benítez Vinueza será después el autor de la gran novela Argonautas de la Selva. Y el mismo Sergio Núñez Santamaría, devendría en novelista del bandidaje ( Árbol que no da fruto ), que fuera llevada al radioteatro por Edmundo Rosero Espinoza, y precursor del indigenismo ( Novelas del páramo y la cordillera ). Hugo Mayo, rapsoda muy adelantado para la época, derivaría en poeta de la corriente de Bretón y los surrealistas. No faltará quien rebase las fronteras más allá del verbo, Miguel Ángel Granado y Guarnizo, siguiendo al parecer las huellas de Orfeo y Eurídice,la poesía, es el único que se perderá en el archipiélago de las sirenas…

Los Hermes no tuvieron un MAS, pero es evidente que, con singular originalidad, supieron trabajar y soñar en el plano poético y literario y dotar al país de una representación de alta tesitura en el concierto de las naciones.

Sólo el genocidio del 15 de noviembre de 1922 y la llamada revolución Juliana de 1925 ,serán los heraldos de un enérgico viraje de nuestra valiosa literatura modernista hacia la vigorosa,fecunda generación del 30.






¿Hasta cuándo?…

¿Hasta cuándo?… P or Fabián Núñez Baquero 18/03/22   ¡ No más guerras por Dios! ¡ No más negocio...